sábado, 19 de septiembre de 2009

Clásica Del Norte tiene nuevo líder


El antioqueño Mauricio Ortega (Une-Epm) ganó ayer la segunda etapa de la Clásica de Norte de Santander que se disputó sobre 160 kilómetros entre Cúcuta-Puerto Santander-Cúcuta Chinácota y desbancó del sitial de honor a Julián Rodas (Indeportes-Antioquia-Idea-Fla), que guapeó, pero no aguantó la arremetida del nuevo líder.

El tramo de media montaña, en su parte final, sirvió para que el favorito a ganar la Clásica exhibiera las habilidades para el terreno quebrado después que los pasistas se lucieran en lo llano.

El ganador marcó para los 160 kilómetros 4 horas 5 minutos y 28 segundos. Segundo se apareció el ex líder Julián Rodas con una desventaja de 1,01 segundos y tercero, Raúl Saavedra (Liga de Norte Santander) a 1,12 seg.

Ortega en la general acumuló 6 horas 43 minutos y 18 segundos y tiene una ventaja de 28 segundos sobre Rodas y 1,28 sobre Saavedra.

Tras el paso por el premio de montaña de categoría C, en la recta a Corozal, a 15 kilómetros de la meta, donde se impuso Óscar Álvarez comenzó la lucha de poder de los amigos de las águilas donde Ortega, Julián Rodas y Saavedra (Liga de Norte de Santander) dieron el primer grito de batalla.

Después un breve pero rápido descenso comenzó la trepada final de diez kilómetros donde Ortega no dio cuartel y se impuso en el último puerto montañoso de segunda categoría en los Álamos a seis kilómetros de la meta, con 40 segundos de ventaja sobre el ex líder, diferencia que aumentó en la llegada a Chinácota.

Caídas, retiros y lucimientos

La primera parte de la fracción se disputó bajo terreno relativamente plano y con una fuerte temperatura.

Los corredores locales se hicieron notar en varios pasajes. En la ida a Puerto Santander, Kevin Rincón (Gobernación de Norte de Santander Bono de Ciclismo Tre Colli) fue líder transitorio con una diferencia que logró de 45 segundos en solitario sobre el grueso del pelotón.

Mientras que el corredor de Ocaña (Kevin Rincón) iba al frente, sus compañeros de equipo Rolando Trujillo y Edison Paredes más Hernán Darío Muñoz (EPM Une) se fueron al pavimento después de pasar por Agua Clara. Paredes fue el peor librado y abandonó la competencia con lesiones en la mano izquierda que obligó su traslado al Hospital Erasmo Universitario Erasmo Meoz.

En el tramo por el anillo vial Yosmar Jerez (Liga de Norte de Santander) se mostró y alcanzó a tener sobre el pelotón una luz de 300 metros en compañía de Weimar Roldán (GW Shimano Chec Edeq) que les bastó para cruzar primeros por el último premio de velocidad donde el nortesantandereano fue segundo.

El último percance se observó en el inicio del ascenso cuando Orlando Acosta y Fernando Silva (Secretaría de Hacienda Indeportes de Boyacá) se estrellaron contra un carro de los comisarios de la carrera, pero por fortuna sin graves consecuencia.

Hoy se disputará la penúltima etapa sobre 100 kilómetros entre San Cayetano y Pamplona con tres premios de velocidad, uno bonificado; y cuatro puertos de montaña, el último de primera categoría en El Camellón, a dos kilómetros de la meta.

posiciones

Etapa
1.- Mauricio Ortega (Une-Epm) 4H05M28 seg.
2.-Julián Rodas (Indeportes-Antioquia-Idea-Fla)1,01 seg.
3.- Raúl Saavedra (Liga Norte de Santander) 1,12 seg.
4.- Óscar Álvarez (Une-Epm) a 1,22 seg.
5.- Carlos Ospina (Gw-Shimano) a 1,28 seg.
6.- Rolando Trujillo (Bono del Ciclismo) (a 1,35)

General
1.- Mauricio Ortega (Une-Epm) 6H43M18 seg.
2.- Julián Rodas (Indeportes-Antioquia-Idea-Fla) a 28 seg.
3.- Raúl Saavedra (Gob. Norte de Santander) a 1,18 seg.
4.- Carlos Ospina (Gew Shimano) a 1,30 seg.
5.- Óscar Álvarez (Une-Epm) a 1,32 seg.
6.- Rolando Trujillo (Bono del Ciclismo) a 1,45 seg.

Otros líderes
Metas volantes: Weimar Roldán
Premios de montaña: Mauricio Ortega
Mejor extranjero: Edwin Becerra (Sumiglow Mérida-Venezuela)

Me faltó confianza: Raúl Saavedra

El corredor de la Alcaldía de Cabimas y refuerzo de la escuadra de la Liga de Norte de Santander Raúl Saavedra se mostró arrepentido de no sostener el ataque en los momentos en que lo hizo.

“Me faltó confianza y cuando decidí atacar era tarde, porque Mauricio (Ortega) me había tomado ventaja” dijo el residente en el barrio La Libertad que presta el auxilio de carro neutral a través de su empresa Ciclo Repuestos Saavedra.

Saavedra que el 27 de septiembre cumplirá 40 años consideró que todavía hay kilómetros para mejorar el tercer lugar que ostenta en la general.

No hay nada para el último

Los tiempos cambian hasta en el ciclismo. Hace 40 años o menos al que portaba el farolito de la competencia le daban más que al que la ganaba.

Según cuenta el ex ciclista y periodista Gustavo Rojas Pérez el último de la prueba recibía dinero, la Biblia, Cien Años de Soledad y regalos de toda índole.

“A veces al último le iba mejor que al primero” recordó Rojas Pérez.

Pero todo cambia y al que llega de último a duras penas lo esperan los jueces y lo acompaña la ambulancia.

El ex campeón de la Vuelta a la Juventud de Venezuela y colero de la primera etapa de la Clásica, José Aguillón (Alcaldía de San Cristóbal Imandere) no recibió nada, pero no por ello se inmutó.

“La verdad no esperaba nada por llegar de último, lo único que espero en la Clásica es no repetir la carrera del primer día.

El pupilo del ‘Coyote’ Porfirio Ortega dijo que el último lugar no le preocupaba porque estaba de vuelta al ciclismo de alta competencia.

El venezolano cumplirá el domingo 20 años, dijo que una vez se retire del ciclismo aspiraba estudiar abogacía.

Ejemplo de vida

El jueves cuando José de Jesús Mendoza o ‘Japonés’ como lo conoce la familia del ciclismo se apareció en la Clásica la emoción fue grande.

El más veterano de los jueces de ciclismo, 62 años, se puso otra vez el overol y estaba en acción aunque no pudiera estar montado en una moto, como lo fue en los más de 35 años de ejercicio de su profesión.

“Estuve en cualquier cantidad de vueltas a Colombia y Venezuela, Clásico RCN, clásicas regionales, Vuelta al Táchira y Juegos Centroamericanos y del Caribe” recordó.

Desde hace cuatro años y algo más ‘Japonés’ se fue de las carreteras porque una enfermedad denominada Proteínas totales altas lo postró en una cama y con escasas posibilidades de sobrevivir.

Tras ganarle la lucha a la muerte se levantó y trató de andar con la ayuda de un caminador porque las piernas no obedecían del todo las ordenes que le mandaba el cerebro.

Tras los primeros pasos recurrió a un bastón y después de dos años se irguió y camino sin la ayuda nadie.

“Solo Dios es el dueño de la vida y seguiré en el ciclismo hasta cuando él me lo permita”.

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